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| Roberto Lückert, arzobispo de Coro |
En una entrevista concedida a la periodista Faviana García del periódico zuliano La Verdad este lunes 13 de enero, esta autoridad eclesiástica expuso su rechazo al Matrimonio Civil Igualitario bajo razones meramente religiosas, alegando que el fin último de la unión de pareja (heterosexual) es la procreación, algo que físicamente es imposible entre dos hombres o dos mujeres.
Aunque trató de matizar sus declaraciones alegando que a los homosexuales se les debe "brindar asistencia", fue tajante en rechazar la posibilidad de casamiento.
Leamos la entrevista, cortesía del diario La Verdad:
Lückert: “La idea final del matrimonio es procrear”
Aunque la unión de parejas homosexuales no es un tema nuevo en el mundo, a diario activistas luchan por poner este tema en discusión por primera vez en Venezuela. Por su parte, la Iglesia católica sigue conservando su punto de vista. Monseñor Roberto Lückert, obispo de Coro, defiende que el matrimonio se define como la unión entre un hombre y una mujer, ya que estos se complementan afectiva y sexualmente, por lo que planteó, ante la posibilidad de buscar el reconocimiento de las parejas sexodiversas ante la ley, que quienes apoyen este documento "tendrán que buscarse otro tipo de término para la resolución judicial".
"La idea final del matrimonio es la de procrear. En este caso esto no es posible, por lo que se plantea una dificultad, porque esta pareja no va a poder procrear. En todo caso, deben buscar otra resolución judicial porque esto va contra el derecho civil, natural y religioso". Monseñor agregó que en caso de aprobarse este recurso en la ley civil, él no es quien "para perseguir a las personas homosexuales".
"Al hombre y la mujer homosexual nosotros solo podemos guiarlos, asistirlos, entenderlos y escucharlos, hasta allí. No podemos estimularlos a que sigan con esa actitud que va contra los principios de la Iglesia católica. Solo podemos acompañarlos en la fe porque todos somos hijos del mismo Dios".
El papa Francisco también habló sobre este tema con la misma visión al terminar el encuentro de jóvenes realizado en Brasil en 2013. Ante un fórum de periodistas dijo que no juzga a los homosexuales: “Si una persona es gay y busca al Señor y tiene buena voluntad, ¿quién soy yo para juzgarlo?”. Luego procedió a explicar que “el Catecismo de la Iglesia Católica lo explica de forma muy bella: dice que no se debe marginar a estas personas por eso. Hay que integrarlas en la sociedad. Debemos ser hermanos”.
Activistas
Luis Meneses, presidente de la Fundación Venezolana de Apoyo a la Diversidad Sexual (Fuvadis), participó junto con otras organizaciones en el impulso de este proyecto. "Tenemos año y medio en esta lucha. Primero comenzamos con una campaña de sensibilización con pancartas, fotografías, artistas y personajes de la diversidad y frases como 'Yo apoyo al matrimonio', 'Soy gay, vivo en pareja', 'Quiero casarme', 'Mismos derechos con los mismos nombres', para que la población entienda cuál va a ser la lucha". Relató que se visitaron varios estados para la recolección de las firmas; lograron 18 mil rúbricas que serán anexadas al documento que presentarán.
Esperan que los acompañen mil activistas. "De lo que habla el proyecto en sí es de darle derecho a las parejas ya estables, aquellas parejas que tienen tiempo en concubinato y que a nivel legal no se les garantiza el derecho a los bienes mancomunados. También se habla de lo que sería la modificación del artículo 44 del Código Civil, donde se expresa que el matrimonio es entre un hombre y una mujer; al modificarlo estamos proponiendo que se le coloque que el matrimonio es entre personas sin distinción ni discriminación de orientación sexual o de género. Nos basamos en la sentencia 190, en la que se deja claro que es la Asamblea Nacional la que tiene que legislar a favor de los derechos de la sexodiversidad".
Reto a la educación
El papa Francisco consideró que las realidades de la sociedad actual, como los hijos que conviven con parejas homosexuales, son un "desafío educativo nuevo para la Iglesia católica, sobre todo para anunciar el Evangelio". "Recuerdo el caso de una niña muy triste que al final le confesó a la maestra el motivo de su estado de ánimo: ‘La novia de mi madre no me quiere’”, contó en noviembre de 2013 durante la clausura en el Vaticano de la 82.ª Asamblea General de Unión de Superiores Generales de los institutos religiosos masculinos. Exhortó a los educadores a "transmitir el conocimiento, las formas de hacer y transmitir los valores, a través de los que se transmite también la fe”.
Tomado de: http://www.laverdad.com/zulia/44153-luecket-la-idea-final-del-matrimonio-es-procrear.html
El argumento de Lückert sobre el fin último del matrimonio, la procreación, está detallado en el Catecismo de la Iglesia Católica, capítulo tercero, artículo 7, "El sacramento del matrimonio":
La apertura a la fecundidad
1652 "Por su naturaleza misma, la institución misma del matrimonio y el amor conyugal están ordenados a la procreación y a la educación de la prole y con ellas son coronados como su culminación" (GS 48,1):Por supuesto, muchos se preguntarán qué sentido tiene el Matrimonio católico en una pareja que no puede tener hijos. He aquí la respuesta:
1654 Sin embargo, los esposos a los que Dios no ha concedido tener hijos pueden llevar una vida conyugal plena de sentido, humana y cristianamente. Su matrimonio puede irradiar una fecundidad de caridad, de acogida y de sacrificio.
Con el respeto que se merece la Iglesia Católica, así como el resto de las religiones que se oponen a la legalización de las parejas del mismo sexo en Venezuela, se les recuerda que no deben mezclar los Derechos Civiles con asuntos de fe.
El Matrimonio CIVIL Igualitario, como su nombre lo indica, es un asunto meramente LAICO, en el que se reconocen los derechos legales de toda pareja, indistintamente de su orientación sexual. No es justo que los homosexuales deben cumplir con todos los deberes que le impone el Estado pero no pueden acceder a todos los derechos, tal como sí pueden los heterosexuales. Esto es pura discriminación.
Al igual que los heterosexuales, los homosexuales también tienen derecho a seguridad social, acceso a planes de vivienda, traspaso horizontal de bienes cuando un miembro de la pareja fallece, seguros médicos, entre otros.
Cada religión es libre de aceptar o no el matrimonio eclesiástico en sus respectivas iglesias de acuerdo a sus doctrinas, pero no deben pasar la raya y entrometerse en asuntos estrictamente civiles, como es el Matrimonio Homosexual.
Exhorto a los líderes de la mayoría de las religiones "cristianas", en particular la Católica, a que sean honestos consigo mismos y revisen la historia de San Agustín (354 - 430 DC), considerado "Doctor de la Iglesia" quien fue un homosexual reprimido y abolió la separación del matrimonio civil del eclesiástico en el antiguo Imperio Romano.
¡Nada ni nadie detendrá el ejercicio pleno de nuestros Derechos, por ello decimos SÍ AL MATRIMONIO CIVIL IGUALITARIO!
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